Frontelo y Patternlot son los proyectos más personales de la diseñadora de interiores y artista multidisciplinar talaverana, Laura Ramón Frontelo, que ha conseguido con el segundo el prestigioso premio ELLE Talent Project 2020, el concurso que premia la mejor idea de negocio en el mundo de la moda
Es la única talaverana ganadora del Talavera Open Future, el acelerador de empresas e ideas nacional organizado a finales de 2021 por Telefónica y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha para atraer y retener talento
Licenciada en Bellas Artes por la Universidad Central Saint Martins de Londres, la joven creativa talaverana, Laura Ramón Frontelo, ha trabajado durante los últimos diez años en Madrid y Londres diseñando las oficinas de PriceWaterHouseCooper, Cisco, L’Oreal, Mapfre, IBM, Havas Media y El Banco Santander, entre otras. También ha ejercido como enlace local para empresas extranjeras que querían implementar proyectos en España y es colaboradora en el departamento de escenografía de Atresmedia.
Con su proyecto Patternlot ha conseguido el Premio ELLE Talent Project 2020 y además es la única talaverana ganadora del Talavera Open Future, organizado por Telefónica y la Junta de Comunidades. Un acelerador de empresas y de ideas del que han salido seis proyectos ganadores, entre ellos el de la artista talaverana.
Laura Ramón Frontelo defiende que el talento está deslocalizado y que ha tenido que llegar una pandemia a demostrar que hay vida laboral más allá de una oficina ubicada en una gran ciudad. “Uno puede trabajar desde cualquier sitio, de manera local y aun así tener repercusión global”. En esta entrevista en primera persona, Laura Ramón Frontelo habla de sus proyectos más personales, de su trayectoria y de Talavera de la Reina como epicentro de su emprendimiento, su creatividad y su vida.
¿Qué significa para ti y para tu carrera estar entre los seis ganadores del Talavera Open Future?
Estoy muy contenta, es una gran noticia porque supone un impulso muy importante a la actividad creadora y empresarial. Además, se compite a nivel nacional y soy la única talaverana que está entre los seis ganadores y eso es un orgullo. En diciembre se hizo la selección y ya estoy trabajando con el programa.
¿Qué es Frontelo?
Es mi proyecto más personal. Una marca de diseño de estampados que lancé hace 3 años y que comercializa diseños propios plasmados en diferentes soportes. Empecé con cerámica y ahora estoy más enfocada en el textil. A comienzos de años exportaba a Japón pañuelos de seda cosidos a mano e impresos con ilustraciones mías. En marzo empecé a imprimir estampados sobre tejido hidrófugo para confeccionar mascarillas y desde entonces lo compagino con el diseño, fabricación y venta de mascarillas higiénicas.
¿Y Patternlot?
Patternlot es un proyecto que estoy lanzando paralelamente a Frontelo: un marketplace de venta de estampados online, no solo míos sino también de otros diseñadores. La plataforma conecta diseñadores de estampados de todas partes del mundo con fabricantes textiles y empresas de moda, papelería e interiorismo.
¿Cómo diseñadora, cuáles son tus principales fuentes de inspiración, dónde o cómo ejercitas tu creatividad?
Todo lo que creo está inspirado en los viajes que he hecho y en la gente que he conocido durante esos viajes. Diseño estampados innovadores y disruptivos que cuentan historias viajeras y aunque a primera vista parezcan diseños complejos de formas inconexas, todos mis estampados esconden historias de países remotos en forma de dibujo. En algunos, si estás atento, puedes encontrar alebrijes mejicanos en forma de monos, gatos o leones pero para encontrarlos realmente tienes que prestar mucha atención al dibujo, es como si estuvieras jugando a encontrar a Wally entre millones de formas de color. El estampado se convierte así en un tablero de juego que te invita a descubrir historias ocultas, las historias que vivo en mis viajes.
¿Con respecto a Patternlot, cuándo descubriste que tenías una buena idea empresarial?
Patternlot surgió un poco por casualidad. Tuvo mucho que ver mi propia experiencia con las ferias. A comienzos del año pasado empecé a ir a ferias internacionales para dar a conocer los pañuelos que yo misma diseñaba. En esas ferias había gente interesada en comprarme no solo los pañuelos sino también los estampados para poder imprimirlos ellos mismos bajo sus propias marcas. Entonces empecé a averiguar cómo hacen los diseñadores para vender estampados, que resulta que también tienen que ir físicamente a ferias en Nueva York o París. Salir a ferias al extranjero es terriblemente caro. Lo es para el vendedor pero también para el comprador y me empecé a preguntar si no era un intercambio que se pudiera realizar online. Por otro lado gracias a que me encanta viajar y desde que me fui a vivir a Londres he experimentado diferentes maneras de entender el trabajo, en remoto, mas descentralizadas y globales así que se me ocurrió crear una plataforma online que potenciara vínculos a nivel internacional.
¿Cómo se te ocurrió?
Ya llevo tiempo pensando que el futuro está en la venta online y dándole vueltas a crear un modelo de negocio que aúne todas esas ideas que me rondaban la cabeza. Al mismo tiempo una amiga me habló del ELLE Talent Project, un concurso organizado por ELLE donde para participar había que enviar un plan de negocio viable relacionado con la moda, la tecnología y el diseño. Decidí presentarme y el tener como objetivo la fecha de entrega del concurso me obligó a articular todas las ideas sobre el papel en un tiempo récord. De pronto se unieron todos los puntos y surgió Patternlot.
¿Cómo fue el viaje de Patternlot hasta llegar a ser el proyecto ganador del Elle Talent Project?
Presenté el plan de negocio en Febrero del 2020 y me llamaron en Junio para decirme que había sido una de las diez seleccionadas a nivel nacional. Me dijeron que había pasado la criba de innovación, moda y diseño por parte de ELLE pero que de esos diez el IE Business School aún tenía que seleccionar los cinco proyectos finales en función de su viabilidad financiera. Me dijeron que me llamaban para avisarme por si me quería preparar un pitch final porque en caso de ser una de las cinco seleccionadas tendría muy poco tiempo para poder preparar la defensa del proyecto ante el jurado. En Junio no me daba la vida con el tema de las mascarillas, estaba literalmente desbordada y pasé un poco de prepararme nada. No entendía porque me llamaban si ni siquiera era finalista.
Un par de semanas después volvieron a contactar conmigo para decirme que era una de las cinco finalistas y que tenía cinco días para prepararme la defensa del proyecto. Hacía seis meses que había presentado el plan de negocio y ya no recordaba nada de nada y de pronto me vi con que tenía que preparar la defensa en menos de una semana. Dicen que si tienes cinco semanas para hacer algo tardas cinco semanas pero que si tienes cinco días para hacer lo mismo tardas cinco días en hacerlo y así fue, salió.
¿Has contado con financiación y/o colaboradores estratégicos para tu proyecto?
El premio del ELLE Talent Project fue una beca para hacer un master en el IE y además 25.000€ en efectivo que es lo que estoy usando para poner en marcha el proyecto y a medida que avance con él miraré posibles subvenciones de apoyo al emprendimiento ofrecidas por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Si un emprendedor o emprendedora creativa aspira a encabezar un proyecto similar al que tienes puesto en marcha ¿Qué tres consejos le darías?
Trabaja mientras otros duermen, estudia mientras otros se van de fiesta, ahorra mientras otros gastan y persiste mientras otros se rinden. Van cuatro, no se cual dejar fuera.
¿Qué aporta Talavera de la Reina a tu proyecto?
Creo que no podría haber emprendido desde ningún otro sitio. La gente tiende a decirme que si estoy loca, que después de haber vivido en Londres cómo se me ocurre volver a Talavera, que me voy a estancar, que las ciudades grandes son las que te ofrecen las oportunidades. Y yo sin embargo estoy convencida de que estar en Talavera es uno de los factores que me ha facilitado poder emprender. Aquí tengo a mi familia, que siempre me echa una mano cuando lo necesito, cosa imprescindible e imposible si estuviera fuera. Aquí tardo 15 minutos en ir a cualquier lado. Fuera se te van dos horas al día en transporte. 40 horas mensuales. Me parece una pérdida de tiempo. Talavera está bastante bien situada. Tardar hora y veinte a Madrid es casi lo mismo que tarda en ir a trabajar mucha gente que vive en grandes ciudades.
¿Y a nivel de asesoramiento y ayuda por parte de la Administración local?
Acceder a ayuda y/o asesoramiento a nivel institucional es más fácil porque la gente conoce lo que haces a un nivel más personal, te pone cara y facilita la difusión. El coste de vida en Talavera me permite invertir mis ingresos en avanzar con mi proyecto sin tener que endeudarme a ciegas. En Londres o en Madrid, olvídate, uno trabaja para pagarse el alojamiento. Hoy en día, uno puede trabajar desde cualquier sitio, de manera local y, aun así, tener repercusión global. Ha tenido que llegar una pandemia a demostrar que se puede trabajar desde la casa del pueblo y que hay vida laboral más allá de una oficina ubicada en una gran ciudad.
De Talavera al mundo
Laura Ramón Frontelo ha sido seleccionada para algunos premios de diseño, arte y emprendimiento que incluyen Clyde & Co Art Awards, Blank Canvas Prize, NOVA Award patrocinado por LOWE+ Partners, Art Partner Project, European Coworkings de la EOI y Elle Talent Project organizado por la revista ELLE y el IE Business School.
Ha expuesto su obra internacionalmente en galerías como Gallery OXO y Royal Academy of Arts en Londres y colaborado con galerías en EEUU como la Gitler Gallery de Nueva York, entre otros.